Según la tradición oriental, antes de dejar la Tierra, Buda convocó a todos los animales para despedirse de ellos. Pero frente a él solo aparecieron 12 especies. Como recompensa, Buda asignó a cada año el nombre de uno de ellos, lo que dio lugar a los doce signos animales del horóscopo chino actual.

¿Por qué te contamos esto?

Porque estamos en febrero, mes en el que se celebra el Año Nuevo chino, y 2024 es el año del… ¡dragón! ¿Has visto alguno últimamente? Porque a nosotros nos viene a la mente uno muy rojo, con 8 loopings y que es capaz de hacerte volar a una velocidad de vértigo.

¡Sigue leyendo para descubrir su historia y curiosidades que no conocías!

Dragon Khan, una historia de altos vuelos

Corría el 1 de mayo de 1995 cuando PortAventura World abrió sus puertas por primera vez para mostrar al mundo entero un sinfín de maravillas que jamás podría olvidar. Entre todas ellas. había una que destacaba por encima de cualquier otra: nuestro increíble e imponente Dragon Khan.

En su día, batió el récord mundial de inversiones, dejando a todos boquiabiertos con sus 8 loopings. Además, en ese momento contaba con el looping más alto del planeta, con una altura de 36 metros.

Vamos, una obra maestra de la ingeniería y del entretenimiento de aquel entonces que alcanzaba los 45 metros de altura en su punto más alto y los 110 kilómetros por hora.

Es normal que, con estas características, se convirtiera en el emblema de nuestro parque y millones de personas nos visitaran para disfrutar de él.

¿Cuántas veces has subido tú?

Si ya lo has hecho, sabrás que su minuto y medio de duración empieza con un predrop, una pequeña caída de 1 metro antes de la gran bajada, que es muy característica. Este elemento no es casual, sino que es un gran recurso estructural que, además de dar suspense a la atracción, sirve para reducir la tensión en la cadena y hacer que la experiencia sea aún más segura.

Su leyenda

Dragon Khan está situado en pleno corazón de nuestra China, en el templo del primer emperador del imperio.

Se cuenta que un orgulloso príncipe llamado Hu intentó destronarlo utilizando las artes más oscuras, pero fracasó. ¿Su castigo? Los sabios dioses no dudaron en encerrar su alma en el cuerpo de un dragón alado. Y volando, furioso y avergonzado, emprendió el exilio hasta llegar a nuestro parque.

Por eso sus giros son tan vertiginosos, porque dentro de él permanece la esencia salvaje de aquel joven príncipe.

Dinos, ¿te atreves a intentar domarlo?

Que tengas un gran año del dragón, repleto de fortuna, valentía y retos estimulantes.

 Si estabas esperando el mejor momento para lanzarte a vivir esa gran aventura con la que siempre has soñado, ya ha llegado. ¡Abre bien las alas y a por todas! Nosotros te esperamos donde siempre para crear grandes recuerdos y vivir experiencias que no olvidarás.